sábado, 1 de febrero de 2014
UN TEXTO (SUB BLOG) DE JOSÉ LUIS BREA.
La crítica en la era del capitalismo cultural
electrónico
Jose Luis Brea [22-04-06]
No existen los hechos, tan sólo las (mal)interpretaciones
El objeto de la crítica no es nunca la verdad. Ni siquiera la interpretación, la buena
interpretación –tal cosa no existe. Toda crítica malinterpreta –o lo que es lo mismo: dispersa el
significado. Debemos pensar la crítica únicamente como dispositivo diseminador, como
maquinaria de proliferación del sentido, como aliada incondicional del estado incumplido de
las economías del significado.
Línea de sombra
En tanto que invención, el trabajo de la crítica no tiene por misión hacer emerger el efecto que
domina desde lo alto la serie, la ecuación nomológica que abarca lo indomesticado. Al
contrario, su tarea es acercarnos a ese punto de desbordamiento en que la serie se ve
excedida, hacia ese territorio de inestabilidades en que lo que conocemos –se revela en su
insuficiencia.
Conceptos zombi
El nuestro es un tiempo de transformaciones profundas, de movimientos tectónicos que
afectan a la totalidad de los modos de organizarse el mundo, al dominio categorial que
articula nuestras capacidades de comprenderlo y habitarlo. Si se quiere, la crítica tiene que
ver con el desajuste que se vive entre esos procesos de cambio tremendo, profundo, y la
inmovilidad mantenida en las arquitecturas institucionalizadas del discurso.
e-ck
De esto hablamos cuando hablamos de capitalismo cultural electrónico: del advenimiento de
una fase del modelo de producción capitalista caracterizada porque en ella se desplaza el
centro de los procesos de generación de riqueza hacia la producción simbólica (y su consumo,
y su distribución a través del potencial de las redes electrónicas). Eso significa, en primer
lugar, el fin del existir segregado (de los procesos de generación de riqueza) de la producción
de narrativas e imaginarios de identificación. Y en segundo lugar, la emergencia de un nuevo
sector del trabajo (inmaterial) y la producción cuya aparición va a transformar profundamente
el orden de la división del trabajo más primordial –el que separaba a los productores
simbólicos del trabajador ordinario.
Tolerancia cero
27 of 44 Pensamiento obliquo * Textos de José Luis BreaLo diré de otra forma: tolerancia cero con el espectáculo. Si la crítica tiene un lugar –en el
que verdaderamente ser crítica- éste no puede bajo ninguna forma participar de la lógica del
espectáculo. Esto inhabilita por completo dos de las formas en que a la crítica más le
encandila –en el momento actual- ejercerse: primero, el escenario de la curaduría
(particularmente en la forma que ésta ha alcanzado al hilo de la llamada bienalización del
arte). Segundo, el del medio de comunicación de masas (y particularmente de nuevo en la
forma de éste por excelencia alcanzada en el contexto del deslizamiento de las industrias
del arte al escenario de las del espectáculo, a saber, la del suplemento periodístico -soi
dissant “cultural”).
Inconsciente óptico
Admitamos la siguiente hipótesis: que el lugar de la crítica en el contexto de lo que se ha
llamado el arte contemporáneo (el del siglo XX, digamos) estaba prefigurado por el
“régimen escópico” en que el desarrollo de éste se inscribía. Podríamos describir tal régimen
escópico como uno de “inconsciente óptico”, dominado por la convicción de que siempre hay
algo “que no vemos” en lo que vemos, o más exactamente algo que no (sabemos que)
conocemos en lo que vemos.
Desespacialización
La transformación de las economías de la visualidad por la emergencia y asentamiento de
una imagen-tiempo presiona en contra de los dispositivos espacializados de exposición de
las prácticas de creación visual. El crítico debe sumarse a esa presión, favoreciendo la
transformación rápida de los viejos dispositivos para hacerles cuanto antes capaces y
adecuados a la presentación de las nuevas formas de un time-based-art emergido al impulso
del asentamiento de tal imagen-tiempo (incluso allí donde esta presión haga pensable la
desaparición de tales dispositivos).
e-archives
Tan pronto como aparecen las tecnologías reproductivas del conocimiento, tiene lugar para
el arte una auténtica “transmutación de todos los valores” que es crucial para la suerte del
proyecto crítico –y el lugar en el que su trabajo puede a partir de entonces realizarse. Me
refiero a la transfiguración del valor aurático, cultual, en exhibitivo, y la disociación
simultánea del cognitivo de él. Mientras que el valor exhibitivo se queda depositado en el
original –como residuo del antiguo aurático, pero ahora en la nueva economía del
espectáculo de masas- toda la carga del cognitivo se desplaza al territorio de las
reproducciones y los distintos aparatos “epistemológicos” que articulan su acceso:
básicamente el archivo –pero también el manual de historia, el carro de diapositivas que
sostiene las clases, la revista especializada con sus reproducciones, el catálogo …
interlectura
Este es el modo en que la disposición-memoria (RAM) de una red opera: en tanto que
articulación de mutualidad entre lugares que se someten a interacción recíproca, a
contrastación, a puesta en acto de sus diferencias. No por tanto como las memorias ROM
(de back-up) por medio de la consignación documental, en archivos de recuperación, sino a la
manera de las memoria de sistema, relacionales, distribuidas, en que cada parte del todo
28 of 44 Pensamiento obliquo * Textos de José Luis Brealee y resuena en cada una de las otras, como un eco miniaturizado y fractal que recorre
cada una de las partes en un barrido sistémico continuo.
crítica sin condición
Ya hemos señalado los dos territorios en los que la crítica se encuentra desarmada y
cautiva: el periodismo y la gestión cultural (en ambos la crítica queda reducida a mero cómplice
necesario de los intereses del entretenimiento, como mucho capellán en su marco de la
buena -falsa- conciencia dominante).
atrapada
Como tantas otras, la de la crítica es una actividad atrapada entre el ser y el deber ser. El
problema para ella reside en que el territorio en el que puede ser no deja más que un lugar
a su enunciado de un deber ser –propio suyo o de aquel otro sistema con el que se
relaciona, el del arte. Y ese lugar no es otro que el de hacer sostenible la presunción de que
–en el campo de las prácticas artísticas- el ser y el deber ser pueden coincidir en algún
punto.
Conceptos nómadas
Para el trabajo que realiza la crítica, la fábrica no es la tradicional arquitectura sintética de
la razón, constantemente produciendo síntesis de convergencia y subsunción, sino un modelo
de dispersión molecular conectivo en el que las líneas de contraste y confrontación (de lo ajeno
con lo ajeno) generan constantemente novedad, la diferencia modal puesta en –y por- la
interlectura recíproca que todo lugar efectúa sobre todo otro. La producción de concepto
(soportada en la circulación de textos o imágenes) es entonces el resultado del nomadismo
y entrechoque interno de los puntos del sistema en sus actos de contraste y comunicación,
en su capacidad –la de cada nodo de la red- para transfigurarse o valer por otro o en otro
lugar.
Prácticas zombi
Centrándonos en la esfera de las prácticas artísticas –de las prácticas de producción
simbólica desarrolladas mediante el uso del significante visual- podríamos afirmar que esas
transformaciones profundas de nuestro tiempo revelan un desajuste similar. En este caso
no sólo los conceptos que manejamos para comprenderlas viven un tiempo prestado, sino
que también las propias prácticas adaptan su forma final a tales conceptos, por lo que
ellas mismas terminan aconteciendo como pertenecientes a un tiempo muerto, como
prácticas zombi.
signos del tiempo
Inevitablemente, esta transformación de las sociedades actuales que trae a la producción
inmaterial al centro mismo de las nuevas economías de producción y consumo genera un
fuerte impacto sobre el sentido y función de las prácticas artísticas en ellas. Podemos valorar
este impacto a través de 2 grandes signos: el primero, una tensión de absorción de la
totalidad de las prácticas de producción simbólica al seno de las industrias culturales y del
29 of 44 Pensamiento obliquo * Textos de José Luis Breaentretenimiento.
mercenarización
Tienen razón quienes se escandalizan –ante un hecho que cada vez parece más
generalizado. La orbitalización de un conjunto de supuestos “dispositivos de criticidad” por
parte de la propia institución-arte: revistas de crítica, blogs, congresos, elaboraciones de
presuntas “historiografías alternativas”, pseudouniversidades propias …
e-image
La economía de la imagen que se realiza bajo las condiciones puestas por los desarrollos de
las tecnologías electrónicas desplaza de forma radical lo que podríamos llamar su impulso
mnemónico, la forma en que ella opera como dispositivo-memoria. Y ello por una razón
fundamental: que mientras la formas tradicionales de realización de la imagen cristalizaban
en materializaciones estables (docu / monumentales) la forma del darse de la imagen
electrónica es volátil, pasajera, tiene el carácter mismo del fantasma (como la imagen en
su lugar natural: la imaginación).
Mil pantallas
Mil pantallas. Acaso todavía no ponderamos bien lo que supone una red de escenarios tan
diseminada y ubicua como la que representa un mundo saturado en todas partes de
pantallas. Acaso todavía no ponderamos bien la singularidad que como soporte poseen –esta
especie de cuadernos mágicos, en los que lo que aparece tiene la misma cualidad del
fantasma. Acaso todavía no somos capaces de valorar su alcance ubicuo, la instantaneidad
del transporte que proporcionan, la posibilidad de apariciones multisíncroas o simultáneas
que ofrecen, la recepción privado/colectiva pero dissimultánea que propician, su carácter
de heterotopías prácticas, encastradas en lo real …
economías de colectividad
Ahora, se trata de poner juntas dos cualidades. De un lado, la de este devenir distribuido del
impulso mnemónico de las imágenes y sus archivos –en lo que determina no sólo modos de
apropiación colectiva de las producciones cognitivas, sino auténticas formas colegiadas de
su propia producción, de su creación y generación. En ellas habrá de comparecer el “común”,
esas formas de la intelección general que fundamentan de base toda la reivindicación sobre el
carácter imprivatizable de los productos del saber …
posicionamientos
Situada en medio de ese proceso febril de interlecturas recíprocas de todo lo distinto por
todo lo distinto, el trabajo de la crítica interfiere propiciando ejercicios reflexivos (en el
sentido más especular que se quiera) para favorecer el (auto)conocimiento de las
condiciones bajo los que cualquier acto enunciativo o expresivo se verifica. El objeto de la
crítica es entonces las puesta en evidencia –inclemente- del conjunto de dependencias que
todo acto de producción enunciativa o cognitiva tiene con la constelación significante (con la
episteme específica) en la que se inscribe y adquiere valor.
30 of 44 Pensamiento obliquo * Textos de José Luis Brea
carácter modelo
Sea en la investigación universitaria –en las condiciones indicadas- sea fuera de ella, el
trabajo de la crítica tiene hoy como primer desafío el generar los propios dispositivos y
aparatos en los que su propia actividad pueda darse: su primer compromiso ha de ser con
la generación de sus propios agenciamientos.
Online critique
Esta escritura ensayística -que se aparece no sólo como dominio del juicio o la valoración, sino
también y sobre todo como territorio o máquina de proliferación de las interpretaciones y
multiplicación de los sentidos- debe atravesar y exponerse al reto de la interacción, del estar
online, del contrastarse en tiempo real que las nuevas tecnologías comunicativas hacen
posible.
Espejismos
En su sentido más profundo, toda crítica debe ser invención, actividad productiva. No le
corresponde a ella ocuparse de lo ya conocido, ni siquiera de lo cognoscible, de lo en un
momento dado cognoscible. Su trabajo no consiste en hacer su objeto más comprensible,
más universal o más asequible lo inescrutable. Ella no está ahí para producir consenso,
para acercar las producciones simbólicas al acuerdo lector. Al contrario, su trabajo es
invención –y por ello penetración en lo oscuro, en lo no cognoscible en cada tiempo dado. La
crítica es por tanto y siempre multiplicación de los disentimientos, de la diversidad de las
lecturas, producción intertextual y agonística –alejamiento de cualquier espejismo de facilidad
en la lectura.
contraepistemes
Una buena crítica ofrece marcos de lectura y comprensión del presente sólo en este sentido:
en cuanto evidencia que esas prácticas que reconocemos como artísticas están de hecho
desbordando lo que en cada ahora –en cada constelación epocal del valor, del saber- se
constituye como marco de comprensión estabilizado.
Redefinición
Tanto las prácticas artísticas como la propia institución-Arte experimentan la tensión impulsiva
que la exigencia de adecuación a las nuevas necesidades simbólico-antropológicas de nuestra
época proyecta sobre su dinámica. Demasiado rápido, sin embargo, la sacrifican a un
impulso de supervivencia que sentencia su miseria. Mientras la indagación creadora de estas
prácticas siga sometida al trance del ensayo y error, y éste se vea administrado por el
premio-castigo de la institución-Arte existente (cristalizada en mercado y museo), ese nadar
en la miseria está asegurado.
arenas movedizas
31 of 44 Pensamiento obliquo * Textos de José Luis BreaEn relación a la crítica, la institución juega sus bazas del siguiente modo: que en el proceso de
transformación que presiona a favor de la absorción de las prácticas de producción al seno de
las industrias culturales expandidas a las del entretenimiento y el espectáculo se otorga a
la crítica una función protagonista en relación a las ingenierías de la opinión pública.
Cháchara
La multiplicación de las agencias interpretativas: he ahí el factor seguramente más favorable
en nuestro tiempo a los desarrollos de la criticidad. Hay que aprender a trabajar con ello, en
ese escenario en que la palabra del cualquiera –en un horizonte postmedial que está
multiplicando ad infinitum la proliferación de las agencias emisoras- comparece por igual
autorizada –alcanzando una especie de “posición de origen” como la reclamada por Rawls en
su teoría de la justicia.
Curaduría y banalidad
La expansión de las industrias del entretenimiento que sigue a la consagración del
espectáculo en las sociedades contemporáneas absorbe las prácticas de producción de
sentido a su territorio, convirtiendo al crítico en gestor integrado bajo la figura del curator
como agenciador de oferta cultural. Es tarea del crítico resistir a la banalización de su trabajo,
oponiendo al objetivo que preside la demanda -el aumento de la audiencia- un objetivo
propio de aumento de la cantidad de sentido que circula.
Paralaje / historia
Tenía razón Hal Foster en sostener que no hay posibilidad de crítica sin el apoyo de la
historia, porque todo análisis en profundidad de la obra requería ponerla en paralaje,
mostrarla en relación al pasado frente al que crecía –y en cuanto al que adquiría significado y
dimensión. Pero esto … ha dejado de ser cierto (ninguna verdad es eterna: no me desconectes
Hal).
economías de distribución
Lo que está en juego –y dejémonos de pamplinas- es el tránsito para todo el sector de las
prácticas artísticas desde una dominante economía de comercio (con una escena del don
dominada por el intercambio oneroso de objeto-mercancía) hacia otra de distribución (en la
que la producción de beneficio económico se fija en relación a la posible regulación del derecho
de acceso a la información circulante, distribuida).
incomplicidad con el dogma (la crítica como estudio cultural)
¿Qué es la crítica tan pronto como deja de lado su complicidad –sitémica- con el dogma en
base al cuál se instituye el hegemónico valor social de las prácticas artísticas?
...............................................................................
Estudios visuales, esto es: estudios no cómplices –distanciados, reveladores de
posicionamiento- sobre “la vida social de las imágenes”, sobre “la producción de significado
cultural a través de visualidad”.
32 of 44 Pensamiento obliquo * Textos de José Luis Brea
crítica y ensayo
Como quiera que sea, es preciso restaurar, restablecer y repotenciar el terreno de la
escritura como dominio fundamental de ejercicio de la crítica. Ello implica en cualquier caso
una retirada del espacio periodístico, en el que la crítica sucumbe a las exigencias (siempre
banalizantes) de la información y los intereses de publicitación de las industrias de la
conciencia en su búsqueda sistemática de una proyección espectacular -apoyada en lo
mediático.
RAM_critique (blog critique)
Bien entendido que hablamos del ensayo como una muy precisa forma literaria
caracterizada por, antes que nada, su carácter fragmentario, micrológico y paratáctico,
refractario a cualquier pretensión de prefigurar formaciones cargadas de aspiración veridictiva
global –todo lo contrario, el espíritu de desmantelamiento es su èlan- y orientado a la
intervención puntual, específica y concreta, precisa y nítida como una espada de Hatori Hanzo.
©©
***
La crítica en la era del capitalismo cultural electrónico es un conjunto de 32 notas posteadas
que intenta constituir una pequeña teoría de la crítica de arte en la actualidad, desarrollada
como un sub-blog de ::agenciacritica
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