Es curioso pensar, como antes algunos artistas del pasado, de alguna u otra forma, siempre han intento poner de manifiesto a través de sus obras, el momento sociopolitico que ocurría es su ciudad o en su país. En la actualidad se sigue haciendo lo mismo, pero en dimensiones más grandes, englobando a casi todo el planeta. Una muestra de ello, es la exposición de Avelino Sala en la Galería Ponce y Robles, que mediante conceptos intangibles como la clandestinidad, la indignación o la manipulación, consigue llevarlos a objetos materiales con mensajes que son una clara critica a la gran problemática de nuestros días. Aunando diferentes disciplinas como son el video, la instalación, la escultura, la fotografía y el dibujo, un medio el cual parece, nunca ha abandonado.
La pieza que más llama la atención son las dos vitrinas que contienen una serie de piedras colocadas y archivadas como si fueran objetos arqueológicos, pero en realidad son mucho más que eso, pertenecen a fragmentos de las manifestaciones en contra de las injusticias que se produjeron por casi todo el mundo desde el año 2011, son la única arma de los manifestantes como forma de lucha y al mismo tiempo de defensa. Que el artista ha recopilado, muy acertadamente, y colocado en la sala como si de objetos valiosos se tratara. Convirtiendo una de esas piedras en una artefacto bañado en bronce, de un modo fetichista, como símbolo de la riqueza que perecer ser, es lo más importante para las personas y por consiguiente el origen de todos los males, en lo que concierte a la ambición por tener más que el resto sin importar a que precio o que forma tenga el objeto si contiene materiales de gran valor.
Otra obra que refleja algo que está a la orden del día, es la que representa por medio del video art el concepto de la clandestinidad. Las chuletas para copiar en un examen es algo que todos hemos echo en algún momento de nuestras vidas, siempre de forma oculta, porque sabíamos que era algo prohibido. Pero no solo estas cosas se hacen en la clandestinidad, sino también otras muchas, como la corrupción. Idea que nos lleva a la obra siguiente, esta vez a través de las palabras. Cui Prodest? - ¿Quién se beneficia?, que formó parte recientemente de la XII Bienal de Arquitectura y Urbanismo de Madrid que tuvo lugar en Matadero, volviendo a poner en tela de juicio al modo en que se procede jurídicamente, ya que se trata de una frase utilizada en ese ámbito. Y que lo que parece ser la única vía por la que se pueden solucionar las cosas, a resultado no serlo.
Tres fotografías que representan tres actos iguales, como es la quema de la bandera. Las cuales están veladas quedando relegadas a una pequeña parte dentro de dicho fondo. Según el artista, las coloca de esta manera para no darle una gran importancia, pero el hecho de que sean pequeñas y no estén en el centro, sino en los los laterales, hacen que irremediablemente tengas que fijarte con mayor atención. Es por eso que de alguna manera, si que les da una mayor importancia.
Pero lo que parece poner de manifiesto a través de sus obras, es el arte como un acto de resistencia, como medio de una postura ante la vida que nos rodea. Nos habla de lo manipulable e intangible de los sistemas simbólicos, y nos hace preguntarnos si alguna vez el poder dejará de estar en manos de los más “fuertes” o nos hemos acostumbrado tanto a ello, que nada cambiará.
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